Este 2025 se conmemora el 80 aniversario de la liberación de los campos de concentración nazis, una fecha de enorme relevancia para la memoria democrática. Desde la Asociación Triángulo Azul Stolpersteine de Andalucía se subraya que este año debe servir para rendir tributo a quienes sufrieron el Holocausto y para reforzar el compromiso social contra el racismo, la intolerancia y cualquier forma de violencia dirigida contra colectivos humanos por motivos de etnia, color de piel, religión, ideas políticas u orientación sexual.
El Holocausto supuso la persecución y exterminio sistemático de seis millones de judíos entre 1933 y 1945, así como de cientos de miles de personas consideradas “indeseables” por la ideología nazi. Entre ellas se encontraban personas con discapacidad, gitanos, homosexuales, prisioneros de guerra y antifascistas de todas las edades y condiciones. Cerca de 10.000 españoles fueron víctimas de los campos nazis, y en la provincia de Córdoba se han contabilizado al menos 353 hombres. Ocho de ellos nacieron en Montoro y acabaron prisioneros en el campo de exterminio de Mauthausen, en Austria.
El pasado viernes 28 de noviembre, el Ayuntamiento de Montoro y la Asociación Triángulo Azul Stolpersteine de Andalucía, con la colaboración de la Asociación Memorialista de Montoro “El Olivo”, rindieron homenaje a estos ocho vecinos con la instalación de Stolpersteine, las conocidas piedras de la memoria, en la Plaza de España, a la entrada de la Biblioteca Municipal. Este espacio albergará además documentación y materiales informativos sobre los deportados para que toda la ciudadanía y visitantes puedan conocer su historia.
De esta manera, Montoro reconoce públicamente a Vicente Luis Franco Hidalgo, Manuel García Pedrero, José Lama Priego, Francisco Majuelo Canales, Francisco Moreno Hernández, Antonio Moreno Mora, Simón Perales Expósito y Mateo Teodoro Vega Delgado. Todos ellos fueron exiliados tras la Guerra Civil, participaron en la defensa de Francia frente a la Alemania nazi y, tras la caída francesa, fueron hechos prisioneros y trasladados a Mauthausen por decisión conjunta de Hitler, Franco y Pétain. Allí perdieron sus nombres y pasaron a ser números. Solo José Lama Priego logró sobrevivir; el resto fue asesinado en Gusen o en el Castillo de Hartheim.
Durante el acto en la Plaza de España, el Ayuntamiento de Montoro destacó la importancia de dignificar a estos vecinos y de devolverles el lugar que les corresponde en la historia democrática. Las Stolpersteine, creadas por el artista alemán Gunter Demnig, cumplen precisamente esa función: invitar a detenerse, recordar y no olvidar.
Este homenaje se integra en el compromiso firme del municipio con la memoria democrática, la defensa de los derechos humanos y la construcción de una sociedad más justa. Las piedras formarán parte de la futura Ruta de la Memoria Democrática de Montoro, que se pondrá en marcha el próximo año. El Ayuntamiento invita a toda la ciudadanía a participar en este camino de reflexión y memoria compartida, recordando que sin memoria no hay democracia y que el recuerdo de lo ocurrido debe ser una guía para el futuro.