El Ayuntamiento de Montoro ha aprobado de manera definitiva la nueva ordenanza municipal que regulará el servicio de auto-taxi en la localidad, tras no haberse presentado alegaciones durante el periodo de exposición pública abierto tras el pleno celebrado el 27 de mayo de 2025. El texto normativo, publicado en el Boletín Oficial de la Provincia de Córdoba del 26 de agosto, entrará en vigor dentro de quince días hábiles y pretende modernizar y adaptar este servicio público a la realidad actual, garantizando la seguridad, la calidad de la prestación y los derechos de los usuarios.
La ordenanza establece que para poder ejercer la actividad de transporte público en automóviles de turismo será necesario contar con la correspondiente licencia municipal. Dichas licencias tienen carácter indefinido, aunque están vinculadas a un vehículo concreto y exigen dedicación plena por parte de sus titulares, que deberán acreditar aptitud profesional, carecer de antecedentes graves, estar al corriente de sus obligaciones fiscales y sociales, así como disponer de los seguros exigidos por la legislación. Se contempla también la posibilidad de transmitir las licencias por causas justificadas, como el fallecimiento, la jubilación o la invalidez del titular, mientras que se regulan de forma expresa las causas de caducidad y revocación, entre ellas el abandono del servicio sin causa justificada o el uso indebido de la autorización.
En cuanto a los vehículos, la normativa establece condiciones técnicas y de seguridad obligatorias, como un maletero mínimo de 300 litros, sistema de climatización, extintor, dispositivos de comunicación y los distintivos municipales, que incluyen la placa con número de licencia y el escudo de Montoro. El límite de antigüedad general se fija en 12 años, ampliable hasta 14 en el caso de vehículos adaptados o de bajas emisiones, lo que supone un incentivo a la renovación de la flota y a la apuesta por modelos más sostenibles.
El servicio de auto-taxi deberá prestarse de manera continuada, las 24 horas del día, con un sistema de guardias nocturnas que garantice la atención de los usuarios. Se fijan dos paradas oficiales en la Plaza del Charco y en el Plano de la Feria, además de la obligación de contar con un teléfono de contacto operativo. La ordenanza recoge normas de comportamiento y servicio hacia el cliente, entre ellas la obligación de un trato respetuoso, la prioridad para personas con movilidad reducida, la admisión de perros guía y la prohibición de cobrar cantidades superiores a las tarifas aprobadas, que deberán estar siempre visibles en el interior del vehículo. También se prohíbe expresamente la colocación de publicidad en los coches sin autorización municipal.
El texto incluye un régimen sancionador dividido en infracciones leves, graves y muy graves. Las sanciones pueden ir desde simples apercibimientos o multas de pequeña cuantía hasta sanciones económicas de hasta 2.760 euros. En los casos más graves, como prestar servicio bajo los efectos del alcohol o las drogas, incumplir reiteradamente las obligaciones básicas o abandonar a los pasajeros, se contempla incluso la suspensión temporal de la actividad e, incluso, la retirada definitiva de la licencia.
Con esta ordenanza, Montoro da un paso importante en la regulación de un servicio esencial para la movilidad local, al tiempo que busca reforzar la confianza de los usuarios y garantizar que el transporte público en automóvil de turismo se preste con los estándares de seguridad y calidad exigidos por la sociedad actual.
