Adamuz libera a la lince ibérico ‘Kai’ tras su recuperación en el CREA Los Villares

La Junta de Andalucía devuelve al medio natural a una hembra de alto valor genético en el paraje de Valderragos, marcando un hito en el programa de conservación del lince ibérico en Guadalmellato

10 de diciembre de 2025 a las 09:50h
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Suelta de Kai en el paraje de Valderragos en Adamuz. Foto: Junta de Andalucía
Suelta de Kai en el paraje de Valderragos en Adamuz. Foto: Junta de Andalucía

Adamuz se ha convertido este martes en escenario de un nuevo hito para la conservación del lince ibérico en Andalucía. La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta, Catalina García, ha participado en la liberación de la hembra ‘Kai’, un ejemplar que regresa al medio natural tras superar un complejo proceso de recuperación en el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) Los Villares.

La suelta ha tenido lugar en el paraje de Valderragos, dentro del área de reintroducción de Guadalmellato, uno de los territorios clave en la consolidación del felino en la comarca y en toda Sierra Morena. Equipado con un collar de seguimiento, el animal será monitorizado para evaluar su adaptación, movimientos y comportamiento durante las próximas semanas.

Un regreso al campo con especial valor ambiental

La consejera ha subrayado que esta liberación “representa una segunda oportunidad para un ejemplar que sufrió una lesión grave”, destacando el trabajo veterinario y técnico que ha permitido su recuperación. La historia de Kai, ha señalado, simboliza “la fortaleza de la especie y la eficacia de los recursos públicos destinados a su conservación”.

Kai nació en libertad en 2013 y es hija de ‘Eclipse’, una de las hembras fundadoras del núcleo de Guadalmellato. En julio de 2025 fue localizada con una lesión severa en la extremidad trasera derecha. La intervención médica obligó a amputar la extremidad, lo que motivó su traslado al CREA Los Villares, donde comenzó un proceso de rehabilitación para evaluar su movilidad y capacidad predatoria. Los técnicos certificaron finalmente que la hembra mantenía las condiciones necesarias para vivir de nuevo en libertad.

Esta es además la primera suelta en Guadalmellato de un lince ibérico recuperado tras una intervención quirúrgica tan compleja, lo que la convierte en un acontecimiento sin precedentes dentro del programa autonómico de conservación.

Suelta de 'Kai' en Adamuz. Foto: Junta de Andalucía
Suelta de 'Kai' en Adamuz. Foto: Junta de Andalucía -

Amplia representación institucional y presencia educativa

Al acto han asistido el alcalde de Adamuz, Rafael Ángel Moreno; el delegado territorial, Rafael Martínez; el coordinador del Proyecto LIFE LynxConnect, Javier Salcedo; responsables de Amaya, técnicos del CREA, Agentes de Medio Ambiente y el propietario de la finca donde se ha llevado a cabo la suelta. También han participado unos 50 alumnos del IES Luna de la Sierra, acompañados por su directora.

Expansión del lince ibérico hacia nuevos territorios

La liberación de Kai llega días después de confirmarse la presencia de una nueva hembra adulta en Cabra, en las Sierras Subbéticas, donde no había registros estables del felino desde hace décadas. El marcaje de esta hembra, denominada ‘Igabrum’, permitirá obtener información clave sobre conectividad ecológica y desplazamiento entre territorios.

Según recordó la consejera, el lince ibérico continúa expandiéndose hacia nuevas sierras y campiñas, reflejo de una metapoblación “estable, dinámica y en crecimiento”. Andalucía mantiene una posición decisiva dentro de la distribución del felino: en 2024 se contabilizaron 836 ejemplares en la comunidad, contribuyendo a una población peninsular total de 2.401 linces ibéricos.

Resultados impulsados por los proyectos LIFE

García destacó que este avance ha sido posible gracias a una secuencia de proyectos LIFE liderados por Andalucía en colaboración con Portugal y otras regiones. El actual LIFE LynxConnect se encuentra en su fase final, y la comunidad trabaja ya en un nuevo proyecto para el periodo 2026-2031, que reforzará la conectividad genética, la restauración del hábitat y la planificación frente al cambio climático.

La consejera recordó que todos los linces que viven hoy en la Península descienden de 75 hembras andaluzas, lo que evidencia el papel fundador de la región en la recuperación de la especie.

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