La huelga convocada por sindicatos médicos contra el proyecto de Estatuto Marco del Ministerio de Sanidad se desarrolla del 9 al 12 de diciembre de 2025 y ha tenido un seguimiento desigual en la provincia. Según el Sindicato Médico Andaluz (SMA), el paro alcanza un 70% de seguimiento en el Hospital Reina Sofía, con unos 400 médicos adheridos (222 residentes y 178 adjuntos), mientras que la Junta de Andalucía sitúa la participación provincial en un 27%.
Reivindicaciones de los médicos
Los profesionales reclaman mejoras sustanciales en sus condiciones laborales y la aprobación de un Estatuto propio, con demandas que incluyen:
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Reducción de la carga de guardias y límite de pacientes por consulta en Atención Primaria.
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Reconocimiento contractual y retributivo acorde con la formación y la responsabilidad técnica.
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Condiciones laborales dignas que reflejen la exigencia y complejidad de la profesión.
Según el SMA, la huelga es una medida de presión ante cambios considerados insuficientes en el borrador del Estatuto Marco, tras varias negociaciones con el Ministerio de Sanidad.
Impacto en la actividad sanitaria
La huelga está provocando la cancelación y reprogramación de citas, pruebas diagnósticas e intervenciones programadas. Los servicios urgentes y críticos —urgencias, cuidados intensivos, partos y pruebas diagnósticas urgentes— están garantizados por los servicios mínimos establecidos por el SAS, equivalentes a la actividad que se presta un domingo o festivo.
El consejero de Sanidad de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz, advirtió que la huelga tendrá una “altísima repercusión” en listas de espera quirúrgicas y diagnósticas, aunque los pacientes con procesos que requieren asistencia inmediata no verán comprometida la continuidad asistencial.
Servicios mínimos y recomendaciones
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Los servicios mínimos cubren la asistencia urgente, cuidados críticos, partos y pruebas diagnósticas imprescindibles.
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Los pacientes con citas programadas deben confirmar antes de acudir al hospital, ya que muchas consultas y pruebas pueden haber sido aplazadas.
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La Atención Primaria mantiene seguimiento en torno al 40–50%, con servicios básicos garantizados en centros de salud.
La huelga evidencia la tensión entre la defensa de las condiciones laborales de los médicos y el impacto sobre la asistencia sanitaria, subrayando la necesidad de diálogo entre profesionales, Ministerio y comunidad autónoma.
